El verano ha terminado en esta parte del planeta y toca volver a la realidad. Se acabaron las cervezas congeladas o los ricos y refrescantes helados. Por suerte, se va una cosa y viene otra. El otoño trae consigo un gran fruto que muchos estamos deseando todo el año: las castañas.

¿Quién se puede resistir al olor de un puestecito callejero de castañas, una fresca tarde de otoño? Nosotros la verdad que no. Ese olor tan característico, ese calorcito que dan mientras las comes y esa sabor tan peculiar… Son una delicia para todos los sentidos. Este artículo está dedicado al fruto del otoño, las castañas.

¿Cómo se cultivan ?

La castaña es el fruto del árbol nombrado etimológicamente como Castanea, más conocido como castaño. Su nombre proviene de un antiguo pueblo griego que tenía muchos castaños en sus tierras. O Al menos eso cuenta una vieja historia

Es un árbol de hoja caduca que cae en invierno y hasta mediados septiembre o principios de octubre, no se recoge su fruto, las deliciosas castañas. Desde muy temprana edad la humanidad se ha alimentado con ellas, tanto para sobrevivir como para criar a sus animales, principalmente a cerdos.

Es un árbol que necesita de cierta humedad para germinar, por eso es muy común encontrarlos al norte de España. Los castaños son árboles que pueden durar muchísimos años, no es difícil encontrar castaños milenarios. 

¿Qué propiedades tienen las castañas?

Las castañas pertenecen al grupo de alimentos conocidos como frutos secos. Aportan fibra, hidratos de carbono complejos y tienen un bajo contenido calórico. Son perfectas para tomar a media mañana o a media tarde. Son muy saciantes y calentitas ayudan a combatir el frío.

Tienen un montón de propiedades beneficiosas para nuestro cuerpo. Contienen vitamina B1, B3 y B6 que nos darán energía para continuar con nuestras actividades. También son una fuente natural de minerales. Contienen calcio, zinc, magnesio, fósforo y cobre en menos medida.

Todas estas propiedades son beneficiosas para diferentes enfermedades o problemas de salud. Estos son algunos efectos comprobados de las castañas.

  • Gracias a su alto contenido en minerales tienen propiedades antiinflamatorias y vasculares.
  • Las castañas ayudan a controlar la hipertensión y a combatir los problemas de riñón.
  • Su alto contenidos en vitaminas y minerales hace que sea el aperitivo perfecto para personas con anemia o mujeres en época de lactancia.
  • Es un tentempié perfecto para las personas que quieran bajar de peso. Son saciantes, contienen pocas calorías y aportan buenos nutrientes. 100 gramos solo contienen  2,6 gramos de grasa y 20 calorías.
  • Las castañas contienen mucha fibra, por lo que están indicadas para personas que sufren de estreñimiento.
  • Aporta una gran cantidad de energía, así que puedes tomarlas antes de hacer deporte para conseguir un buen empujón.

Cómo cocinar las castañas en casa

castañas otoño

Como puedes, ver las castañas tienen un montón de propiedades beneficiosas para la salud. No solo eso, sino que además están muy ricas. Puedes comprarlas en algún puesto callejero ya cocinadas, es la mejor manera de comerlas y es como están más buenas.

Sin embargo, estos puestos que hace décadas encontrábamos en cada esquina, ahora son muy escasos. En muchos lugares hay que recorrer media ciudad para encontrar uno. Las dificultades económicas y la bajada de popularidad de las castañas de los últimos años, hacen que este tipo de negocios no sean rentables.

Si tienes un puesto de castañas cerca, aprovecha y cómpralas allí. No solo están más buenas, sino que también contribuirás con aquella señora que ha dedicado toda su vida a cocinar castañas. Si no tienes esa posibilidad, a continuación, te damos varias maneras de cocinar castañas en casa. Tan solo deberemos ir al supermercado, comprarlas y elegir una de estas formas de cocinarlas.

  • Castañas al horno. Una de las maneras más concocidas de hacer castañas es al horno. Lavamos las castañas, les hacemos un corte que traspase las capas y las metemos al horno a 180 ºC durante 20 minutos. Sazonamos con sal y a comer mientras nos quemamos los dedos.
  • También podemos hacer las castañas a la sartén. Lavamos, hacemos el corte a las castañas y las ponemos a la sartén a fuego alto. Tapamos con una tapa y removemos de vez en cuando. En 25 minutos estarán listas.
  • Si aún dispones de cocina de gas y eres aficionado a las castañas, te aconsejamos que compres una sartén castañera. Es una sartén llena de agujeros que está pensada especialmente para hacer castañas. Así, el fuego penetra directamente en ellas, consiguiendo un sabor más original. 
  • El método más sencillo para hacer castañas es el microondas. Si tal como lo lees, al microondas. Necesitaremos un recipiente de plástico o uno de silicona para cocinar al micro. Con las castañas húmedas y con el corte hecho, las metemos a máxima potencia durante 10 minutos. El resultado está bien para el poco tiempo invertido.

Esperamos que esta información te haya resultado útil y puedas disfrutar este otoño de unas ricas castañas, ya sean cocinadas en tu casa o compradas en un puesto callejero. Aprovecha la época y disfruta de este maravilloso fruto que nos da nuestra tierra.